Cuatro explosiones, de momento. La amenaza de bomba persiste por prevención.

Se busca a la principal sospechosa de haber colocado los explosivos en Palma.

No es alarmista advertir de que el nuevo modus operandi de ETA puede tener como consecuencia más explosiones que se añadan a las cuatro recientes. Igual que se ocultaron cuatro cargas con detonadores y temporizadores pueden ser más los artefactos colocados y dispuestos para explosionar en el tiempo.

En consecuencia, sin alarmar a nadie y agradeciendo la exahustiva labor policial no deja de ser importante persuadir de que ésto puede que no haya acabado. Los grandes almacenes, lugares concurridos como ya advirtieron las autoridades alemanas pueden volver a ser objeto de un atentado. En definitiva, se trata de que seamos conscientes de lo que puede suceder, pues nuestra mentalidad no es como la de los terroristas que buscan hacer daño, a ser posible continuado y midiendo el tiempo en función de las negociaciones que les interesan, algo ajeno a la mayor parte de la población; pero que en este caso concreto de las Islas no está de más recordarlo, ya que es la primera vez que ETA abre su abanico de crímenes cada vez de manera más cobarde aprovechando las nuevas tecnologías; pero con el mismo peligro para la vida de las personas.

Hacemos un llamamiento a los isleños para que sean conscientes de su responsabilidad en la lucha contra ETA y queremos trasmitirles toda nuestra admiración porque nuestro comportamiento está siendo ejemplar. ETA ha entrado en nuestra casa y no consentiremos que la violencia empañe nuestra convivencia ciudadana, ni entre nosotros, ni con el resto de España, ni mucho menos con el País Vasco. Todos sabemos del buen carácter y amabilidad de la gente del Norte, si en algo ha sido positiva la visita del Lehendakari Patxi López a las Islas Baleares ha sido para ésto, para recordar que no hay que confundir a una banda terrorista de extremistas con las buenas gentes del Norte.